Engullo mi ración sin aspavientos todos contentos y yo con indigestión. Pierdo la dimensión de mi acobarde y toda la tarde recorriendo la estación. Puede que se pudra la ilusión puede que no salga de mi asombro y puede que me quede como estoy.
Vuelto a la realidad, repuesto el cuerpo se amplía el cerco y todo pierde su valor. Así una y otra vez continuamente luego y presente de una vieja tradición.
Puede que se pudra la ilusión puede que no salga de mi asombro y puede que me quede como estoy.