Me dormí por un segundo y al volver a despertar nada estaba en su lugar y me extrañó. Y sentí que el universo se cansaba de girar y algo dentro de mi piel se estremeció.
Debe ser tan normal como el miedo o el dolor, algo que he de controlar mejor.
Al mirar en el espejo tuve dudas de ser yo. Me costó reconocer mi voluntad. Y sentí como algo ajeno el sonido de mi voz. Me dio vértigo pensar en nada más.
Debe ser tan natural como una puesta de sol al cambiar el cielo de color.
Debe ser tan normal como el miedo o el dolor, algo que he de controlar mejor.
Debe ser tan natural como una puesta de sol al cambiar el cielo de color.