Aunque sigas viviendo, para mí ya estás muerta
aunque llegues tocando insistente a mi puerta.
De lo poco que tengo te daré una limosna
como a cualquier mendigo
pero en cosas de amores ya no cuentes conmigo.
Tú me hiciste llorar, tú me hiciste sufrir
pero todo ha cambiado hoy me toca reír.
Aunque sigas viviendo ya olvidé tus ofensas
pero tú al recordar no me habrías de buscar
si tuvieras vergüenza.
Tú me hiciste llorar, tú me hiciste sufrir
pero todo ha cambiado hoy me toca reír.
Aunque sigas viviendo ya olvidé tus ofensas
pero tú al recordar no me habrías de buscar
si tuvieras vergüenza.