Ese hombre que tu tienes no está en nada. En vez de enamorarte te desgasta. No tiene buenos modales, y no es atento contigo. Ese hombre no se merece que le des tanto cariño. El duerme la mañana y tu trabajas... y luego por las noches se te escapa. Te exige que tu le laves, que lo vistas y lo calces... y si acaso tu protestas se indigna y quiere pegarte. ¡Que le den candela! ¡Ay, que le den castigo! Que lo metan en una olla y que se cocine en su vino. ¡Que le den candela! ¡Ay, que le den castigo! Que lo cuelguen de una cometa y que luego corten el hilo. Ese hombre que tu tienes, buena amiga, si yo fuera tu, le dejaría las maletas en la puerta y una nota que dijera: 'A partir de este momento que te cocine tu abuela'. ¡Que le den candela! ¡Ay, que le den castigo! Que lo metan en una olla y que se cocine en su vino. ¡Que le den candela! ¡Ay, que le den castigo! Que lo cuelguen de una cometa y que luego corten el hilo. Que no sea tan malo y haragán. Que sea más bueno contigo. ¡Que se cocine en su vino! Y que agarre otro camino. ¡Que le den candela! ¡Que le den! ¡Que le den! ¡Que le den! Dile que no sea cretino. Ese hombre no te merece. te digo que lo tienes que olvidar.