Como me lástima cuando mi cuerpo Se rebela contra mi mente Y no sé que hacer pues lo que no quiero hacer Es lo que yo hago y lo que quiero hacer No lo puedo lograr.
Miserable de mí, miserable de mí, Quien me librará de esta prisión de soledad, Miserable de mí, miserable de mí, Quien me librará de este cuerpo de muerte.
Confrontada estoy, todo es un reto, Azotada por todos donde quiera Que yo voy con mi mirada firme Solo así lo puedo no hay condenación Al corazón abierto a Dios Así mismo con la mente sirvo la ley divina, Más con la carne la ley de la muerte.