No tengo más fortuna
que estos dos brazos que Dios me ha dao,
si no han tocao la luna
es porque no han probao.
Mis brazos hacen todo
cinchando por un pan bien ganao,
y no le encuentro el modo
pa' que estén olvidaos.
Y no le encuentro el motivo
y Dios es testigo
que lucho conmigo al pensar,
como lucho sin desgano
si mi propio hermano
me puede olvidar.
Le he preguntao al tiempo
donde lleva el amor el de al lao,
me contestó sonriendo
que se había extraviao.
Me pregunté a mi mismo
donde se habrá refugiao,
lo encontró el egoísmo
y lo tiene encerrao.
Abrí los ojos hemano
no te cegués que vas a sonar
por mas montao que vayas
el tiempo te ha de ganar.
La rodada es pareja
y vos no te habrás de salvar,
pisoteada es la tierra
pero al fin te la da.
Y no le encuentro el motivo
y Dios es testigo
que lucho conmigo al pensar
que reventando al de enfrente
revienta o reviente
vamos a reventar.