Cayó por fin
el noble kamikaze
su piel ardió
quemando al enemigo
al ser tocado
cambió de rumbo y apuntó hacia el fin
así le dio razón a su sangre
cayó por fin
el loco kamikaze
creyó ubicar
su propio sol naciente
luego en su reino
el kamikaze comprendió su error:
allí, morir así es en vano