La libertad es una niña hermosa y pura que nos violan al cabo de los años. Cuando crece por encima de los árboles sabemos que no va a sobrevivir.
No puede ser más grande que nosotros mismos, no puede ser más bella que como la concebimos. Es un feo retrato destruido por la fuerza del tiempo en su interior. Es un lindo fracaso sostenido de una buena mirada con amor.
La libertad se va poniendo vieja, la libertad ya no puede parir, la libertad como todo en la vida nació para morir.