Era un sábado a la noche tenía plata y hacía calor Me dije : viejo, aprovechá sos joven y me fui al cine a ver una de terror Salí a la calle, paré un taxi, y me fui (por ahí)
Bajé en Sarmiento y Esmeralda compré un paquete de pastillas Renomé en eso siento que un señor me llama al darme vuelta me di cuenta que eran seis muy bien peinados, muy bien vestidos y con un Ford (verde)
Llegamos a un edificio y comportándose con toda corrección me sometieron a un breve interrogatorio que duró casi cuatro horas y fracción - se hizo muy tarde, dijeron - no hay colectivos... - quedesé! (por favor)
A los tres días de vivir con ellos de muy buen modo me dijeron : Váyase! me devolvieron mis cordones y mi cinto los tenían ellos, no les pregunté por qué cuando salía... me prometieron lo aseguraron... lo repitieron... -Nos volveremos a ver!